125 años del nacimiento del genial Charles
Chaplin
Sir Charles Spencer
"Charlie" Chaplin. Londres, UK, 16/abril/1889 – Vevey, Suiza,
25/diciembre/1977. Charles Chaplin nació en medio de la
más absoluta pobreza en Londres. Llevaba la actuación en la sangre, desde muy
pequeño había convivido con el teatro porque sus padres eran artistas de
varieté.
A los 24 años llegó a los Estados
Unidos con una compañía teatral. Hacía apenas un año que Mack Sennett construyó
los estudios Keystone, el cual había introducido un nuevo elemento sustancial
en los inicios del cinema: mover la película más despacio dentro de la cámara,
para así aumentar la velocidad del movimiento, consiguiendo de esta forma un
efecto cómico que sería la base de toda la comedia estadounidense de
persecuciones, durante la década de 1920. Mack Sennett fue quién descubrió el
talento de Chaplin y lo contrató para su estudio de comedias Keystone. Chaplin
aprendió rápido el oficio del cine; ya desde la segunda cinta que rodó Chaplin
llevó el traje que lo haría famoso y que se convirtió en su sello: el
mundialmente conocido “Charlot”, su uniforme, un enorme pantalón, zapatos que
le quedaban grandes, la chaqueta arrugada, el sombrero y sobre todo el bastón
que lo acompañó en todos y cada uno de sus infortunios. Unos elementos que
acompañados a su peculiar forma de andar y su mímica lo convirtieron en un
personaje de leyenda.
Chaplin supo sacar partido de sus
extraordinarias dotes como mimo para convertirse en uno de los personajes más
populares del cine mudo. Tenía la capacidad para combinar humor y sentimientos,
argumentos que le dieron una característica particular. Dominador del lenguaje
corporal y su capacidad de crear situaciones cómicas le permitieron en esa
época superar las lógicas limitaciones del cine mudo.
En 1919 fundó junto con Mary
Pickford, Douglas Fairbanks y D.W. Griffith el estudio United Artists, en el
que se produjeron sus películas más famosas: "The Kid" (1921) con la
atmósfera de la típica comedia amarga y sentimental, y "La quimera del
oro" (1925), al que muchos críticos consideran hasta hoy la mejor película
de su carrera. Cuando el cine sonoro se impuso en Hollywood, Chaplin siguió
cosechando éxitos con cintas mudas como "Luces de la ciudad" (1931) y
"Tiempos modernos" (1936), para las que compuso la música.
El guion de la película "El gran
dictador" es meticuloso, un modelo de coherencia y concisión. La costumbre
de Chaplin de improvisar continuamente en sus películas, era una constante
saltarse su propio guion trufando las escenas con nuevas ideas o ‘gags’ que se le
ocurrían al momento de la filmación, pero esa improvisación desapareció durante
el rodaje de la sátira de Hitler y del nazismo, cuyo film es una parodia
descarnada de los dictadores.
Chaplin, además de ser el genial
actor, escribía las historias, las dirigía, componía la música y, la mayoría de
las veces, supervisaba la fotografía. Sus películas tuvieron un éxito
descomunal en todo el mundo. “El Chaplin cómico —Charlot— aún lo podemos ver en
los films cortos —los del cine mudo—, pero en los largometrajes nos sumergió en
temas candentes y humanos; ironizó los tiempos modernos o las dictaduras.
Siempre en sus films se distinguieron por un sello personal, había un toque de
humor y de exageración que convertía muchas de sus películas con secuencias
llenas de ternura, salpicadas con “gags” desternillantes o escenas de una
hiperrealidad desgarradora. Supo cómo nadie andar por el filo de la navaja
contando historias en las que humanizaba la más cruel de las situaciones que el
mundo de su época le tocó vivir. Muchos de nosotros hemos compartido momentos
mágicos, hilarantes y, otros, llenos de ternura y poesía humana; también
hacernos ver las irresponsabilidades de un mundo moderno, así como en algunas
de sus películas defensor de la libertad y de la democracia.
Alegato a la
humanidad, discurso del film "El gran dictador" (1940)
(...) Hemos progresado muy deprisa,
pero nos hemos encarcelado a nosotros mismos. El maquinismo, que crea
abundancia, nos deja en la necesidad. Nuestro conocimiento nos ha hecho
cínicos. Nuestra inteligencia, duros y secos. Pensamos demasiado, sentimos muy
poco. Más que máquinas necesitamos más humanidad. Más que inteligencia, tener
bondad y dulzura. Sin estas cualidades la vida será violenta, se perderá todo.
(...) Ahora mismo, mi voz llega a
millones de seres en todo el mundo, millones de hombres desesperados, mujeres y
niños, víctimas de un sistema que hace torturar a los hombres y encarcelar a
gentes inocentes. A los que puedan oírme, les digo: no desesperen. La desdicha
que padecemos no es más que la pasajera codicia y la amargura de hombres que
temen seguir el camino del progreso humano.
(...) En nombre de la democracia,
utilicemos ese poder actuando todos unidos. Luchemos por un mundo nuevo, digno
y noble que garantice a los hombres un trabajo, a la juventud un futuro y a la
vejez seguridad. Pero bajo la promesa de esas cosas, las fieras subieron al
poder. Pero mintieron; nunca han cumplido sus promesas ni nunca las cumplirán.
Vídeo
GOOGLE
site:luisbusom.blogspot.com
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ResponderEliminarComo siempre muy buen artículo. Saludos
ResponderEliminarHola Lluis. Acabo de aterrizar invitado por por Cecilia de T.A. y con tu permiso me quedo.: soy fan de Charlot!
ResponderEliminarPor lo que he visto, me gusta bastante, enhorabuena y nos veremos por aquí.
un saludo
Te he nominado a los premios Liebster! Pásate: http://eloasisdeloslibros.blogspot.com.es/ Suerte!
ResponderEliminarGracias Marisa Jiménez Pérez por tu nominación a los premios Liebster, pero yo soy un francotirador y gestiono mi blog de forma personal. No me gustan las reglas en las que tienes que someterte para aspirar a ese o a otro cualquier premio; de todas formas agradecido por haber pensado en mí. Saludos afectuosos.
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